La búsqueda de activos que protejan el patrimonio en tiempos de incertidumbre económica cobra más relevancia que nunca. En 2025, el oro y la plata se han posicionado como alternativas potentes para inversores de todo el mundo.
Este artículo desglosa las cifras más destacadas del año, analiza los principales impulsores de precios y ofrece consejos prácticos para diversificar tu cartera con estos metales.
En lo que va de 2025, el oro ha alcanzado un precio récord que supera los 4.000 dólares por onza troy por primera vez. Este comportamiento se traduce en una rentabilidad acumulada cercana al 49% a nivel global y alrededor del 35% en euros hasta septiembre.
Paralelamente, la plata ha roto récords históricos, cotizando por encima de los 34 dólares la onza. Su revalorización supera el 14% anual y acumula un alza del 60% en los últimos años. En 2025, la plata registra un rendimiento cercano al 24%, mientras que los ETFs vinculados al metal superan el 25%.
Detrás de estas subidas vertiginosas, la geopolítica y la economía global juegan un papel fundamental. Los inversores buscan refugio ante conflictos, tensiones arancelarias y dudas sobre la solidez del dólar.
El oro ha sido reconocido históricamente como activo refugio en crisis económicas. Su baja correlación con otros instrumentos financieros lo convierte en un pilar de diversificación.
La plata, por su parte, combina las características de metal precioso con demanda industrial. Su mayor volatilidad puede ofrecer ganancias porcentuales más elevadas en ciclos alcistas, aunque con riesgos de retrocesos bruscos.
Elegir el vehículo de inversión adecuado depende de tu perfil y objetivos. A continuación, las alternativas más populares en 2025:
Aunque atractivos, estos metales conllevan riesgos que es crucial evaluar antes de entrar:
Además, una posible recuperación económica o la calma geopolítica pueden moderar el apetito por activos refugio.
Para aprovechar al máximo las oportunidades sin asumir un riesgo excesivo, considera:
Diversificar entre oro y plata para equilibrar estabilidad y potencial de revalorización.
Seguir de cerca las cotizaciones y utilizar análisis técnico y fundamental para decidir puntos de entrada y salida.
Asesorarte con expertos y evaluar plataformas de confianza antes de realizar compras de físico o participaciones en fondos.
Los analistas proyectan que los bancos centrales seguirán acumulando reservas de oro, sosteniendo precios elevados. Para la plata, un repunte de la actividad industrial y mayor inversión en energías limpias podría llevarla hasta los 75–80 dólares por onza hacia 2027.
¿Sigue siendo seguro invertir en oro y plata? Sí, siempre y cuando se entienda la volatilidad y se diversifique de forma adecuada.
¿Puede la plata superar al oro? En ciclos industriales intensos, la plata puede ofrecer mayores alzas, pero con más fluctuación.
¿Qué proporción recomendar en cartera? Depende del perfil: un 5–10% en metales para conservadores y hasta un 20% para perfiles moderados.
Referencias